Páginas

sábado, diciembre 23, 2006

Diez días… ¿o ya dejé de contar?

Imagen del Sainsbury Archive Virtual Museum



Anoche sucedió algo extraño. Por extraño, creo que se incluye dentro del grupo de asuntos extraordinarios que suceden en mi vida. Por un momento, el asma amainó y por un momento, soslayado, breve pero infinito, me besaron. Fue un beso de primeras veces. Me tocaron. Fue un roce de prisas. Esas prisas que sólo da el deseo fundamentado en bases de amor del bueno, de pasión de antaño y de admiración de mirarnos los rostros por decenios. Añejado el deseo a su vez por catarsis, y rompimientos, y desgarres de corazón continuos.

Anoche volvió a frotarse en mis territorios. Anoche no me dejó sola, me cortejó, me coqueteó, me dejé llevar, y justo antes de la campanada doce, la bocanada de aire que llevaba por burbuja aguantada debajo de mi agua de “valentonías", dejó de existir. Me dejé arrasar por su tocarme, por su frotarme, por su entrar los dedos y moverlos, corazón e índice, anular y corazón, las aspas que dan vueltas a toda mi vida, y la viran de cabeza. Todas las fuckings veces.

Anoche fue otro 22. ¿Los 22 se restan o se suman? No sé si hay que dejar de contar del todo. Hoy, con la frente adolorida por los jadeos y la resaca pulsándome la nuca, todo se siente confuso. Se siente hasta bochornoso. ¿Se sienten promesas?

Mis ojos saben que no deben verlas, que es posible que no las haya, que es incluso probable que no haga sentido nada. ¿Lo saben, o lo intuyen? Puedo echarle la culpa a las copas de tinto, a la cerveza barata y al humo de esencias nada parecidas al incienso pacholí. Mis muslos, por otro lado, se abren y se cierran y piden broncodilatadores que aminoren estos refuerzos y deseos de repetir, quizás lo irrepetible.

Sigo sin saber qué hacer… con la única diferencia de que anoche me lo gocé de lo lindo. No debería ni cuestionarlo. ¿He de tomarlo como un regalo? Me duele demasiado la cabeza y han regresado los síntomas de fatiga…

2 comentarios:

  1. Yolanda! Saludos, abrazos y Feliz Navidad. Entro por aquí y qué me encuentro... una narrativa como 'Rocket Launcher'. Jejeje.

    Ufff, qué decir del mismo... Cambios o giros en la velocidad de las palabras que concretan una presencia que seduce constantemente, y no hay más que dejarse arrasar...

    Impactante lo de 'las aspas que dan vuelta toda tu vida'...

    Te felicito, tienes mucho talento.
    Te seguiré visitando y leyendo...
    Dios te bendigaAaA!

    P.D. Gracias por las fotos que me enviaste. Gracias a miles.

    ResponderBorrar