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viernes, julio 17, 2009

Quererte desde el orificio
Por José H. Cáez, escritor invitado



Quererte desde el orificio es quererte desde el principio, animalhombre, bestia alada y coleada, escamosa y agallada. Quererte desde el orificio es quererte como el marinero quiere a la sirena. Es huirte de vez en cuando por el miedo simple de quererte, por el miedo simple de entregarme a la canción melodiosa y oleada que te nace en las costillas y te aflora en la garganta. Pero una vez ahí, la historia es distinta. Quererte desde el orificio cuando la historia es distinta, es perderse por completo en la simpleza de tu rostro fugado de alguna pintura endiosada. Así te pienso yo a veces, como un numen poseidónico que se atribuye a sí mismo el poder de las aguas, el poder de todas las aguas, el poder de mi cuerpoagua. Dices que te gusta como mi cuerpoagua se animala y precipita sobre tus manos callosas y manchadas de la pintura con la que coloreas el fondo de tu reino. Tu carne es el manjar de mi huída, tus manos son el golpe tsunámico que se me viene encima cuando decides destronarte e igualarte a los mortales. Pero hasta siendo mortal, embistes cual toro al ruedo, salvaje y por instinto. Me vuelvo una porquería cuando te muerdes el borde derecho de tu labio inferior y reconozco en tu mirada tiburona que tu boca pide carne. Se me derrite la piel cuando la cara se te hinca de tanta sangre corriéndote por las venas. Es esta antropofagia que subvierte papeles, es la que dices que no encuentras en otros.

Quererte desde el orificio, es quererte desde tu olor a reciennacido, a mangle, a playa escondida en algún rincón del nuncajamás; es quererte con tu olor a sudor, con las gotas que se resbalan una a una por mi espalda. Algo me sucede cuando halas el pelo, cuando tu ojos se desorbitan, y el quejido es minúsculo y la exhalación agitada. Algo te sucede cuando mis hombros ceden al temblor, cuando muerdo la sábana. Quererte desde el orificio es hacerlo desde el origen, la apetencia de lo profundo en los huesos, desde el anonimato; quererme desde ti.

1 comentario:

  1. la intensidad, musicalidad, sensualidad y visceralidad poética de este texto no tienen precio. es un texto lleno de sudor, saliva, agua, sangre, semen...simplemente maravilloso!

    un abrazo tanto al escritor invitado como a la diosa dueña del blog! :)

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