Crónicas alborotadas
1. Aunque parezca contradictorio, me gustó que el vuelo de salida del lunes, para regresar a Puerto Rico, se haya cancelado. Si no hubiera sido por eso, jamás hubiera visto a la Luna Roja en todo su esplendor la madrugada del martes. Fue un eclipse maravilloso y haberlo vivido en Bogotá le dio un toque de misticismo y de magia a todo el asunto. Fue el cierre perfecto para esta actividad sin precedentes que convocó a tantos escritores en más de 60 eventos a lo largo de toda la ciudad.
2. Además, la cancelación del vuelo me dio tiempo para pasear a los centros comerciales y a la ciudad. Ver a Bogotá desde ese otro punto de vista fue divino. Le compré mil cosas a la Aurora y de regreso en el avión, me sentaron en primera clase, lo cual jamás me había sucedido antes. Las tres copas de vino tinto que me sirvió el “azafato” me ayudaron a perdonar el mal rato del plante.
3. Me gustó conocer a tanta gente talentosa, escritores cuya vocación y vida son las letras; sin duda lo que les recorre las venas son palabras. Hice dos amigos especiales que necesito mencionar más allá de todo el excelente compartir de la pasada semana: Leonardo Valencia de Ecuador y Claudia Hernández de El Salvador. Siempre estarán en mi corazón.
4. Bogotá está llena de escuelas, universidades y librerías. Es maravilloso ver cuanta importancia da esta ciudad a la cultura, la lectura y la escritura. En uno de los colegios que visitamos, Colegio Anglo Colombiano, en el cual dimos una ponencia sobre qué escribimos, los estudiantes realizan una antología anual de sus trabajos literarios y la publican. Nos regalaron copias y quedamos muy impresionados.
5. Fue majestuosa la organización del evento. Gracias a Cristina Fuentes la Roche y a Izara García que corrieron con toda la logística. Un verdadero placer conocer a Piedad Bonett y a Oscar Collazos, jurados del Bogotá 39, al fabuloso Guido Tamayo, a la periodista Ana Roda, y a la Secretaria de Cultura Martha Senn.
6. Sublime ver en persona, tocar y abrazar a Gastón García y a Daniel Mordzinski, sobretodo por la calidez humana que destila cada cual. Le brindaron al evento un aura especial.
7. Subir por el teleférico al monte Monserrate para almorzar con todos, y luego bajar en funicular fue una experiencia increíble.
8. Me encantaba cada vez que nos preguntaban “¿Hacia dónde va la literatura latinoamericana?” y los 38 señalábamos con el dedo hacia el este u oeste y gritábamos “Hacia allá”. (Digo 38 porque Junto Díaz no pudo acompañarnos).
9. Los afectuosos tratos que me brindaron Jorge Volpi, Andrés Neuman, Wendy Guerra, Ena Lucía Portela, Karla Suárez, Gabriela Alemán, John Jairo Junieles, Iván Thays, Claudia Amengual, Eduardo Halfon, Fabrizio Mejía, Carlos Wynter Melo, Santiago Roncagliolo, Pedro Mairal y Daniel Alarcón son una estampa viva que me abrazará por siempre.
10. La fascinante familiaridad con que Bogotá, su ciudad, su gente, nos trató, nos acogió y nos acunó por la pasada semana se ha adherido a mi piel. Jamás olvidaré la experiencia. Se habló de literatura hasta el cansancio y todos concluimos en que hay “tela pa’ cortar”. Esto es sólo el inicio de “algo que ni siquiera nosotros hemos comenzado, ni nos toca terminar”.
FOTOS DEL ENCUENTRO

Comienza el viaje

Con Wendy Guerra

Con Karla Suárez

Con Andrés Neuman y Karla Suárez

Con Guido Tamayo y compañía

Con Iván Thays, Ronaldo Menéndez, Daniel Alarcón y Santiago Roncagliolo

Con John Jairo Junieles

Con Leonardo Valencia y Claudia Hernández

Con Leonardo Valencia y el Dios del Clítoris

Con Carlos Wynter Melo

Con Gastón García y Alvaro Enrigue

Con Claudia Amengual y Pilar Quintana

Con Santiago e Iván

Con Verónica Stigger, Gonzalo Gárces y Santiago Nazarian

Con Jorge Volpi

Con Fabrizio Mejía

Donde nos llevaron a almorzar

Un trago llamado Canelazo

Daniel Mordzinski y Claudia Amengual

Con Gabriela Alemán y José Pérez Reyes

A punto de almorzar Ajiaco colombiano

Pilar esperando el postre

Los casi 39

Con Ena Lucía Portela y Claudia Hernández

Con William Jimenez (Intelecto) de los cuentos.net

En la Librería Nacional

Firmando libros

Un compartir en el piso 9

¿Hacía dónde va la literatura latinoamericana?
"Hacia allá"

Wendy en el evento de cierre

Alvaro y su encanto

Claudia y sus 39 segundos

Leonardo tan atento como siempre

Andrés firma libros

Santiago también firma

Leonardo siendo entrevistado

Leonardo y Claudia con los medios

Aprovechándome de la dulzura de Volpi

Vámonos en teleférico

Ok, vámonos

Almuerzo en cerro Monserrate

Con la Secretaria de Cultura, Martha Senn

Con Santiago y Cristina Fuentes la Roche

Bajando en funicular con Claudia

Con Guido Tamayo

Otra vez con Claudia

En Plaza de Toros

Que triste cuando se acaba...
Más fotos en
http://moleskinebogota39.blogspot.com/
http://pedromairal.blogspot.com/
http://www.santiagonazarian.blogspot.com/
http://caquiscaidos.blogspot.com/
9 comentarios:
Buenísimas fotos, Yolanda. Ya se las mostré a Nella (te manda un beso). Me he muerto de la risa con la foto del dios del clítoris. Y recién me entero de tu vuelo cancelado. Pero bien por disfrutar de la encantadora Bogotá. abrazos y saludos a la mejor poeta inédita de Puerto Rico
Ay que se me aguaron los ojos! Yolanda te lo gozaste con intensidad. Una acá orgullosa de ti. Me encantaron las fotos, especialmente la que estás bajando en el funicular. Eso del trago llamado canelazo me lo tienes que contar. Igual que la comida. Te veo pronto. Un abrazo.
Me encantaron tus fotos y las de los demas, sobre todo la que aparecen los escritores firmando autografos al aire libre como si fueran estrellas de rock!. Llevaba esperandolas desde el pasado miercoles.
Un abrazo
anaivelisse
Whooooo!!!!
Que sean fotos como estas la que te sigan llenando de inspiración y nunca pares de escribir.
Bienvenida de vuelta.
Estoy orgulloso de ti. Mi luna Negra toda una estrella...
.:Jack.:
estas querida, Yola! There's no turning back now...
Yola - ¿Ves el edificio que queda detrás de la Plaza de Toros, que es escalonado y en ladrillo (como casi todo en Bogotá)? ¡AHI ERA QUE YO VIVÍA!
No sabes el orgullo que siento que hayas sido TU la que representaste a nuestra isla en una ciudad que siento como mi segunda casa. Eso sí, en Monserrate te hubiese llevado a comer fritanga - un poquito de chorizo con papas (las papitas típicas amarillas y pequeñitas que saben riquísimas).
Iva, que genial!!!!!!!
Yo me quedé con las ganas de comer Mazorca Asada en los quiscos de fritangas de Monserrate.
sabes, yo las probé la última vez que fui y la verdad es que no me gustaron. pensé que serían dulces pero no lo son.
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