Tres puertorriqueñas reescriben el canon
por: Yasmín S. Portales Machado
Esta mañana, en la sala Alejo Carpentier de La Cabaña, un nutrido público asisitó a la conferencia “Narradoras afrodescendientes que desafían jerarquías de poder”. La charla, impartida por la profesora Marie Ramos Rosario (Universidad de Puerto Rico), analiza la producción más reciente de las puertorriqueñas Mayra Santos Febres, Yvonne Denis Rosario y Yolanda Arrollo Pizarro.
Nancy Morejón, poeta galardonada con el Premio Nacional de Literatura de Cuba, presentó a Marie Ramos Rosario como una investigadora acuciosa, interesada en temas tan diversos de su cultura como la literatura, el feminismo, el folclore, la música popular y el racismo. Destacó el hecho de que tales indagaciones no se reflejan solo en su abundante bibliografía, sino que cimientan un accionar político constante de lucha por los derechos de la población afrodescendiente de su país.
Marie Ramos Rosario comenzó su intervención explicando que el tema abordado es muy poco frecuente en los estudios literarios del Caribe. Se comienza a estudiar al hombre negro, como sujeto, como personaje y como creador, pero los prejuicios aún impiden que tales acercamientos incluyan a las mujeres afrodescendientes. En este caso, se reflexiona sobre tres personajes femeninos creados por tres escritoras de Puerto Rico: Mayra Santos Febres, Yvonne Denis Rosario y Yolanda Arrollo Pizarro.
¿Qué tienen en común estas mujeres? Su edad, el color de la piel, el origen urbano y el interés explícito en el abordaje del racismo en sus obras. Esto las une, y sus textos revelan esa comunidad. Sin embargo, la crítica literaria no entiende el nuevo canon de literatura feminista afrodescendiente que ellas están definiendo.
De Mayra Santos-Febres analizó a Marina, una esclava cuyo olor corporal refleja sus estados de ánimo o intensiones. Esta característica es usada como resorte dramático, que juega todo el tiempo con el prejuicio racista sobre el cuerpo negro como salvaje, mágico, subversivo. Al final del relato esa referencia se hace explicita: “Para que después digan que los negros apestamos”, comenta Marina tras vengarse de los amos, a punto de escapar para no ser vista nunca más.
Yvonne Denis Rosario, explicó, construye relatos de hombres y mujeres negros de Puerto Rico (residentes en la isla o en New York), los cuales se afirman en su identidad cultural para defender los derechos de la clase obrera. Su objetivo es demostrar que la piel negra no es una marca de fábrica, que define la identidad. En varios de sus relatos defiende el valor de las intelectuales negras en la protección de la cultura.
En el caso de Yolanda Arroyo Pizarro, al compromiso como mujer negra se suma el de lesbiana. En el volumen Las negras (2012), ella denuncia la construcción de la historia nacional de Puerto Rico desde perspectivas racistas y masculinas, que minimizan la resistencia de los africanos ante la esclavitud –mediante conspiraciones y rebeliones– y excluyen el papel de las esclavas en estos procesos emancipadores.
Es llamativa la violencia descrita en los textos de Arroyo Pizarro, que alcanza un nivel poco frecuente en la literatura femenina de Puerto Rico, acaso el único ejemplo sea Ana Lidia Vega (San Juan, 1946), en la década de 1970. Ella usa la violencia de la intimidad como nunca antes se escribió en la isla. Las situaciones que presenta (una esclava comete infanticidio para no tener un hijo esclavo, la difícil relación entre la nodriza negra y el niño blanco) son dramas provocados por las relaciones de poder racializadas y las estrategias de resistencia a las cuales se vieron forzados los esclavos. Al mismo tiempo, esta ruptura estilística de su literatura puede ser entendida como una metáfora de su posición socio política de lesbiana militante, siempre bajo ataque.
Todas ellas aportan un poco al nuevo paradigma de la escritura feminista que, asegura Marie Ramos Rosario, modelan con sus obras. Este canon incorpora personajes femeninos arrojados, con roles liberadores para el resto de los personajes. Es una literatura que encarna la resistencia y recupera la historia.
En sus conclusiones, la profesora Marie Ramos Rosario firmó que la obra de estas tres mujeres es evidencia de una nueva cepa de narradoras afrodescendientes que rescatan la memoria racial. Han conformado, de facto, un nuevo canon literario, donde patriarcado, sexualidad y raza son pilares constantes. Por supuesto, aclaró, la participación en este canon no tiene que limitarse a personas afrodescendientes, la discriminación racial es una experiencia compleja, abarcadora.
Lo que es imperativo es que las nuevas obras sobre sujetos afrodescendientes superen la autocomplacencia y la victimización. Que construyan fábulas con afirmaciones positivas en sus estrategias narrativas.
Mayra Santos-Febres (Carolina, Puerto Rico, 1966). Comenzó a publicar poemas desde el 1984 en revistas y periódicos internacionales tales como Casa de las Américas de Cuba, Página doce de Argentina, Revue Noire de Francia y Review: Latin American Literature and Arts, en Nueva York. Premio Letras de Oro (Estados Unidos, 1994) por su colección de cuentos Pez de vidrio, y Premio Juan Rulfo de cuentos (París, 1996) por Oso Blanco. En el 2000 Grijalbo Mondadori en España publicó su primera novela Sirena Selena vestida de pena, finalista del Premio Rómulo Gallegos de Novela en el 2001. En 2002 publicó la novela Cualquier miércoles soy tuya. En 2005, publicó varios ensayos en Sobre piel y papel y poesía Boat People. En 2006 su novela Nuestra Señora de la Noche fue resultó primer finalista del Premio Primavera de Espasa Calpe. En 2009 publicó Fe en disfraz. Ha sido profesora visitante en Harvard y Cornell University. Actualmente es catedrática y dirige el taller de narrativa de la Universidad de Puerto Rico, recinto de Río Piedras.
Yvonne Denis Rosario (San Juan, Puerto Rico, 1967). Ha publicado sus cuentos y poemas en varias revistas literarias como Tonguas, El Cuervo, Revista Cayey, Revista Identidad y Letras Salvajes. Es profesora en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras y en la Universidad Metropolitana. Está terminando el doctorado en Literatura Puertorriqueña y del Caribe en el Centro de Estudios Puertorriqueños Avanzados y del Caribe. Sus novelas Capá prieto y Bufé, circulan en Cuba.
Yolanda Arroyo Pizarro (Guaynabo, Puerto Rico, 1970). En 1989 ganó el certamen intrauniversitario de la Universidad Central de Bayamón con el cuento “Vimbi Botella”. Ha sido publicada en España, Ecuador, Ghana África, Reino Unido, México, Argentina, Panamá, Guatemala, Chile, Bolivia, Colombia, Venezuela, Dinamarca, Hungría y Francia. En 2004, publicó el libro de cuentos Origami de letras y al año siguiente la novela Los documentados, Premio PEN Club 2006. En 2007 sale su libro de cuentos Ojos de Luna, seleccionado por El Nuevo Día como uno de los mejores del año. Antes y después de suspirar obtuvo premio del Instituto de Cultura Puertorriqueña (Mención de Honor, 2012). Su libro de poemas bilingüe (inglés y español) Saeta (2011), explora el tema de resistencia e historicidad en el marco de la mujer afrodescendiente, rebelde y cimarrona.
Nancy Morejón, poeta galardonada con el Premio Nacional de Literatura de Cuba, presentó a Marie Ramos Rosario como una investigadora acuciosa, interesada en temas tan diversos de su cultura como la literatura, el feminismo, el folclore, la música popular y el racismo. Destacó el hecho de que tales indagaciones no se reflejan solo en su abundante bibliografía, sino que cimientan un accionar político constante de lucha por los derechos de la población afrodescendiente de su país.
Marie Ramos Rosario comenzó su intervención explicando que el tema abordado es muy poco frecuente en los estudios literarios del Caribe. Se comienza a estudiar al hombre negro, como sujeto, como personaje y como creador, pero los prejuicios aún impiden que tales acercamientos incluyan a las mujeres afrodescendientes. En este caso, se reflexiona sobre tres personajes femeninos creados por tres escritoras de Puerto Rico: Mayra Santos Febres, Yvonne Denis Rosario y Yolanda Arrollo Pizarro.
¿Qué tienen en común estas mujeres? Su edad, el color de la piel, el origen urbano y el interés explícito en el abordaje del racismo en sus obras. Esto las une, y sus textos revelan esa comunidad. Sin embargo, la crítica literaria no entiende el nuevo canon de literatura feminista afrodescendiente que ellas están definiendo.
De Mayra Santos-Febres analizó a Marina, una esclava cuyo olor corporal refleja sus estados de ánimo o intensiones. Esta característica es usada como resorte dramático, que juega todo el tiempo con el prejuicio racista sobre el cuerpo negro como salvaje, mágico, subversivo. Al final del relato esa referencia se hace explicita: “Para que después digan que los negros apestamos”, comenta Marina tras vengarse de los amos, a punto de escapar para no ser vista nunca más.
Yvonne Denis Rosario, explicó, construye relatos de hombres y mujeres negros de Puerto Rico (residentes en la isla o en New York), los cuales se afirman en su identidad cultural para defender los derechos de la clase obrera. Su objetivo es demostrar que la piel negra no es una marca de fábrica, que define la identidad. En varios de sus relatos defiende el valor de las intelectuales negras en la protección de la cultura.
En el caso de Yolanda Arroyo Pizarro, al compromiso como mujer negra se suma el de lesbiana. En el volumen Las negras (2012), ella denuncia la construcción de la historia nacional de Puerto Rico desde perspectivas racistas y masculinas, que minimizan la resistencia de los africanos ante la esclavitud –mediante conspiraciones y rebeliones– y excluyen el papel de las esclavas en estos procesos emancipadores.
Es llamativa la violencia descrita en los textos de Arroyo Pizarro, que alcanza un nivel poco frecuente en la literatura femenina de Puerto Rico, acaso el único ejemplo sea Ana Lidia Vega (San Juan, 1946), en la década de 1970. Ella usa la violencia de la intimidad como nunca antes se escribió en la isla. Las situaciones que presenta (una esclava comete infanticidio para no tener un hijo esclavo, la difícil relación entre la nodriza negra y el niño blanco) son dramas provocados por las relaciones de poder racializadas y las estrategias de resistencia a las cuales se vieron forzados los esclavos. Al mismo tiempo, esta ruptura estilística de su literatura puede ser entendida como una metáfora de su posición socio política de lesbiana militante, siempre bajo ataque.
Todas ellas aportan un poco al nuevo paradigma de la escritura feminista que, asegura Marie Ramos Rosario, modelan con sus obras. Este canon incorpora personajes femeninos arrojados, con roles liberadores para el resto de los personajes. Es una literatura que encarna la resistencia y recupera la historia.
En sus conclusiones, la profesora Marie Ramos Rosario firmó que la obra de estas tres mujeres es evidencia de una nueva cepa de narradoras afrodescendientes que rescatan la memoria racial. Han conformado, de facto, un nuevo canon literario, donde patriarcado, sexualidad y raza son pilares constantes. Por supuesto, aclaró, la participación en este canon no tiene que limitarse a personas afrodescendientes, la discriminación racial es una experiencia compleja, abarcadora.
Lo que es imperativo es que las nuevas obras sobre sujetos afrodescendientes superen la autocomplacencia y la victimización. Que construyan fábulas con afirmaciones positivas en sus estrategias narrativas.
Mayra Santos-Febres (Carolina, Puerto Rico, 1966). Comenzó a publicar poemas desde el 1984 en revistas y periódicos internacionales tales como Casa de las Américas de Cuba, Página doce de Argentina, Revue Noire de Francia y Review: Latin American Literature and Arts, en Nueva York. Premio Letras de Oro (Estados Unidos, 1994) por su colección de cuentos Pez de vidrio, y Premio Juan Rulfo de cuentos (París, 1996) por Oso Blanco. En el 2000 Grijalbo Mondadori en España publicó su primera novela Sirena Selena vestida de pena, finalista del Premio Rómulo Gallegos de Novela en el 2001. En 2002 publicó la novela Cualquier miércoles soy tuya. En 2005, publicó varios ensayos en Sobre piel y papel y poesía Boat People. En 2006 su novela Nuestra Señora de la Noche fue resultó primer finalista del Premio Primavera de Espasa Calpe. En 2009 publicó Fe en disfraz. Ha sido profesora visitante en Harvard y Cornell University. Actualmente es catedrática y dirige el taller de narrativa de la Universidad de Puerto Rico, recinto de Río Piedras.
Yvonne Denis Rosario (San Juan, Puerto Rico, 1967). Ha publicado sus cuentos y poemas en varias revistas literarias como Tonguas, El Cuervo, Revista Cayey, Revista Identidad y Letras Salvajes. Es profesora en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras y en la Universidad Metropolitana. Está terminando el doctorado en Literatura Puertorriqueña y del Caribe en el Centro de Estudios Puertorriqueños Avanzados y del Caribe. Sus novelas Capá prieto y Bufé, circulan en Cuba.
Yolanda Arroyo Pizarro (Guaynabo, Puerto Rico, 1970). En 1989 ganó el certamen intrauniversitario de la Universidad Central de Bayamón con el cuento “Vimbi Botella”. Ha sido publicada en España, Ecuador, Ghana África, Reino Unido, México, Argentina, Panamá, Guatemala, Chile, Bolivia, Colombia, Venezuela, Dinamarca, Hungría y Francia. En 2004, publicó el libro de cuentos Origami de letras y al año siguiente la novela Los documentados, Premio PEN Club 2006. En 2007 sale su libro de cuentos Ojos de Luna, seleccionado por El Nuevo Día como uno de los mejores del año. Antes y después de suspirar obtuvo premio del Instituto de Cultura Puertorriqueña (Mención de Honor, 2012). Su libro de poemas bilingüe (inglés y español) Saeta (2011), explora el tema de resistencia e historicidad en el marco de la mujer afrodescendiente, rebelde y cimarrona.
Fuente: http://feriadellibro.cubaliteraria.cu/noticia.php?idnoticia=1288
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