Imagen “I give Up” de Postsecret
Sé que te han detenido otras lágrimas y otros ruegos, lo sé muy bien. Conozco el sentimiento. Te han hecho elegir y has prometido. Has tenido que optar por su reclamo. Un cese y desista. Así, sin adiós y sin poder partir del todo, porque aún cuando no estoy cerca, regresas a olerme las palabras en estos espacios que nos servían de nido de acurrucamientos. Pero intentas cumplir con tu voto, que es mucho más importante que cualquier relación chueca anulada por el tiempo, y tienes mi respeto.
No debe ser fácil, pero lo entiendo. Sin embargo, te veo aún observarme distante, te veo virarme el rostro y continuar tu rumbo. Créeme, comprendo que es lo justo. Pero si hubiera sabido que aquella era la última vez que hablábamos, hubiera dicho otras cosas, cosas más importante, cosas con más significado. Te hubiera llamado “mi amor de siempre” y hubiese dicho “aquí esperaré, algún día, para cuando se pueda”. Te hubiese besado dando gracias por la canción “The space between” y “American Baby”. Y te hubiera obligado a besarme, a tocarme… te hubiese exigido un último orgasmo.
Pero nada de esto ha sido.
Espero que entiendas que no fue mi intención. Mi intención era proteger lo nuestro para que durara un milenio, era salvaguardarlo, era alejarlo incluso de mis propios eventos demonizantes. Era no exponerte, ni permitir mi exposición, porque eras mi joya escondida. La que me daba calor, alegría, la que me salvaba del tedio. La que soplaba aires de inmortalidad a mis pulmones cansados. Cuando necesité rescate, estuviste ahí. Y ahora ya no te tengo. Y ahora parece, que no voy a volver a tenerte…
2 comentarios:
Niña, pero qué profundo.
Yolanda: Además de profundo, sincero y hermoso. Wow! Me hiciste que bajaran unas lagrimitas de mis ojitos. A veces pasamos cosas parecidas en algunos sentidos. Gracias mil por compartirlo amiga. Besos y abrazos.
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