por Carlos Esteban Cana
Crímenes domésticos
Editorial: Cuarto Propio
Autora: Vanessa Vilches Norat
Libro de cuentos perfecto. Palabras precisas para describir la maestría de los once cuentos que integran Crímenes domésticos. Con una cita del director cinematográfico Alfred Hitchcock como epígrafe, marco referencial que nos da pistas del universo narrativo al que vamos a ingresar, Vanessa Vilches Norat involucra al lector en unas historias amenas, entretenidas, escritas en clave femenina. De lo contrario, sin esa clave, no podríamos leer Monstruosa sororidad, Theobroma cacao L.,o Del dulce olor de sus pechos. Descubrimos, en estas páginas, las profundas complejidades que sumergen a los actantes en formas de proceder que alteran lo cotidiano, vidas de mujeres que no corresponden a lo que impone la sociedad. La mano de Vilches no tiembla cuando indaga en la psiquis de personajes lesionados, acierto de cuentos como Fe de erratas y Del hilo de su voz (uno de los cuentos más poderosos). Es inescapable desarrollar estos crímenes domésticos en cierta atmósfera donde la violencia se instala, a veces suavemente (partiendo de la sutil silueta del silencio que se desarrolla hasta un abrupto crescendo), o, por lo contrario, en otras se impone como si de un ritual cíclico se tratara, así lo ejemplifican Otra cena miserable y De la perfección de sus manos, y el ambiente familiar de Hermosas garras. Tampoco pasa inadvertida la caracterización de la voz infantil (Tortita de manteca, Del hilo de su voz) y la construcción de personajes masculinos, quienes se mueven no con libertad, sino con el desconcierto que provoca el paso trémulo ante lo inescrutable; los actos de la mujer que tienen a su lado ( Fe de ratas, Tortita de manteca, Del dulce olor de sus pechos). Incluso la poesía, la belleza del lenguaje, y la nostalgia se asoman, elegantemente, en los últimos dos cuentos del libro, Ojo de luz y Álbum de espejos.
Aunque este libro tiene como año de publicación 2007, en realidad circuló y se presentó en el 2008. Sin temor a equivocarme señalo que cada uno de estos cuentos es antológico. Los recursos que utiliza esta autora dan fluidez, agilidad, verosimilitud a lo narrado. Apunten bien su nombre: Vanessa Vilches Norat. No me queda más que decir lo que destaqué en la primera oración. Crímenes domésticos es un libro de cuentos perfecto.
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